BUSCAR POETAS (A LA IZQUIERDA):
[1] POR ORDEN ALFABÉTICO NOMBRE
[2] ARCHIVOS 1ª, 2ª, 3ª, 4ª, 5ª 6ª 7ª 8ª 9ª 10ª 11ª 12ª 13ª 14ª 15ª 16ª 17ª 18ª 19ª 20ª y 21ª BLOQUES
[3] POR PAÍSES (POETAS DE 178 PAÍSES)

SUGERENCIA: Buscar poetas antologados fácilmente:
Escribir en Google: "Nombre del poeta" + Fernando Sabido
Si está antologado, aparecerá en las primeras referencias de Google
________________________________

lunes, 14 de mayo de 2012

6948.- FERNANDO ZAMORA


FERNANDO ZAMORA. Palencia, 1939.
Vive en Palencia, donde ejerce la Medicina como cirujano general. Interesado en la poesia desde su adolescencia, establece junto con, su otra gran pasión, la pintura, un vinculo que no abandonara nunca.
Relacionado con personas y grupos artísticos variopintos, siempre ha encontrado enseñanzas y amigos. Así, aprendió que la poesía es una forma de ser y de estar en la vida. Un compromiso y un testimonio. No ha sido poeta prodigo en publicaciones, con libros hechos y deshechos. Si mas dispuesto, en cuanto a colaboraciones y lecturas de su poesía, lo que le salva de ser considerado poeta incognito. Desde: 1962 colabora en numerosas revistas y publicaciones de poesía.
Es una de las voces más singulares y coherentes de la poesía castellana contemporánea, cuya obra se encuentra en permanente diálogo con su otra gran pasión, las artes plásticas. En ambas vertientes artísticas desarrolla un estilo personal y reconocible, caracterizado por la búsqueda del lirismo de lo sencillo, un original camino que se bifurca hacia el silencio de las pequeñas cosas y la elocuencia de lo cotidiano. Además de figurar en numerosas antologías y obras colectivas, es autor de los poemarios Fragmentos y variaciones (Endymion, 1994) y Píldoras (2005), y en Ediciones Cálamo Silva de sílabas (2004), Virado a sepia (2006) y Libro para quemar (2008). En colaboración con el fotógrafo Javier Ayarza, ha publicado Palencia, remota y alba (Cálamo, 1998), una visión personal de su provincia, Libro para quemar,(Cálamo, 2008) y Campo a través, (Fundación Díaz Caneja. Palencia, 2010)


COMPRAMOS ORO
Y TODA CLASE DE JOYAS

No se desprenda de ningún recuerdo
sin consultarnos.

Si es portador de alguna dicha
ahora puede canjearla.

Admitimos
colecciones de nostalgia
- antiguas y modernas -
Piezas sueltas:
heridas
de amor.
Solitarios engastes de palabras
- diamantes como anillo
al dedo -
dijes, collares,
pulseras de pedida
con fechas del olvido.

Liquidamos al contado.
Contactar:

de 4 a 8
También
domingos.
Preciosos.
Desusados.






SE BUSCAN

Objetos sin uso,
olvidados, escondidos,
sin pretensiones.

Se gratificará con:
Nuevos usos gratos a la vista
y al espíritu,
evocaciones al pasado
y posibles vistas al futuro.

Preguntar por el transformador de útiles






INDEMNE

entré en la librería y salí
tocado
herido
sangrando
sonriendo
llorando
de risa
seriamente afectado
de colorines
teatral
transfigurado
filosófico
agónico
espontáneo
escandinavo
de mil
amores
con los ojos desorbitados
numismático
poético
       y más
muy contradictorio
pío
frío
inquieto
aliviado

pero
          ¡ah!
                      esta vez
tacaño
al cierre
mi bolso
              aguantó el tirón
divinamente






ALICIAMENTE

entonces entré en el olvido

eran infinitos los pasillos
                       los espejos
                        los rincones

penumbra
luces
ruidos

¡chiiiiis!

allí estaban
                          agazapados

los recuerdos







RETORNO

(a franquear en destino)

Cuando llegue el pasado
y este día parezca
apenas una llama
batida por el tiempo
y tu paso intente
de nuevo recorrer
los campos y los bosques
y las calles y las casas
y tus ojos
rodeados por el viento
y la noche se deslice
por tu boca.

Cuando llegue el pasado
nos encontraremos
en el fin de este silencio
y volverás
                   a ser
en cada cosa.


(De ‘Campo a través’.
Fundación Díaz Caneja. Palencia, 2010)






Soneto

Es tu dolor mi auténtica moneda
por no sé qué veredas de la suerte
a un lado está la vida a otro la muerte.
Jugar es el recurso que me queda.

Si lanzo la moneda esa vereda
se abrirá y ahora sí, ya puedo verte,
y quiero aprovechar que soy más fuerte
para alegrar tu vida mientras pueda.

Pero mi fortaleza es aparente
y por más que persisto en el empeño
todo sigue su rumbo, su corriente.

Por eso es que me siento tan pequeño
que muero y vivo simultáneamente
quedándome en los márgenes del sueño.







No hay comentarios: